¡Hola a todos!
Hoy os quería enseñar una receta clásica para todos los reposteros, que es súper sencilla y perfecta para sacarnos de un apuro en cualquier momento. Las cremas pasteleras pueden parecer complicadas e intimidades de preparar pero realmente son súper sencillas y lo mejor de todo, es que puedes customizarlas para darle tu sabor preferido. A mí personalmente, el sabor clásico de vainilla, no me convence pero la de limón me parece un espectáculo y es perfecta para rellenar tartas, macarrons o incluso galletas.
Cómo siempre, podéis duplicar o triplicar las receta y ajustar el sabor a vuestro gusto. ¡Espero que os guste muchísimo!
INGREDIENTES:
- 50 mililitros de zumo de limón (aproximadamente 1 limón grande)
- 4 yemas de huevo
- 400 mililitros de leche entera
- Ralladura de 1 limón
- 30 gramos de almidón de maíz / maicena
- 90 gramos de azúcar
ELABORACIÓN:
- En un bol, mezclamos las yemas de los huevos con el azúcar, la maicena, el zumo de limón.
- En un cazo mediano, calentamos la leche junto a la ralladura de limón hasta que se infusione.
- Una vez caliente, antes de que rompa a hervir, añadir la mitad de la leche con mucha cuidado al bol de las yemas y mezclamos con una varillas. Una vez tengamos una mezcla homogénea, pasamos la mezcla al cazo caliente y removemos.
- Calentamos la mezcla a fuego bajo hasta que espese. Tarda unos 10-15 minutos.
- Una vez, obtengamos la consistencia deseada, colamos la crema con una colador fino y pasamos a un bol.
- Tapamos con un papel film cubriendo a ras y dejamos enfriar un mínimo de 3 horas.
- Para adelantar el proceso, podéis enfriar la crema en el congelador.
*para decorar, podéis usar una manga pastelera o una cuchara y con la misma parte de atrás realizar diferentes diseños.
¡Espero que os haya gustado y la probéis!
Si queréis más versiones, podéis decírmelo en los comentarios para próximas recetas.